Tony Hutch es un Superintendente de Detectives retirado que dirigió el Escuadrón de Homicidios de la Policía de Cleveland, supervisando más de 40 investigaciones de asesinatos y llevando a más de 50 asesinos ante la justicia durante su carrera. Obtuvo reconocimiento internacional por manejar el conocido caso de John Darwin, el infame "hombre de la canoa" que fingió su propia muerte. La experiencia de Hutch en investigaciones criminales le valió la rara oportunidad de estudiar con miembros retirados de la Unidad de Ciencias del Comportamiento del FBI, una experiencia que compara con una versión real de "Silence of the Lambs".
Basándose en su amplia trayectoria en la aplicación de la ley, Hutch ahora escribe thrillers policiacos que reflejan su conocimiento de primera mano sobre los procedimientos policiales. Su proceso de escritura imita el trabajo investigativo, comenzando con un escenario delictivo y desarrollándose orgánicamente sin tramas o personajes preplaneados. Más allá de su trabajo como detective, Hutch fue pionero en esfuerzos para abordar los crímenes de honor y su impacto en las víctimas. Un ávido lector de toda la vida, equilibra la escritura con caminatas costeras en Northumberland y apoyando al Newcastle United como un dedicado poseedor de abono de temporada.