Robin Burcell es una autora estadounidense muy destacada, conocida principalmente por sus novelas de crimen y suspenso. Ha escrito varias series, incluyendo las series de Sydney Fitzpatrick y Kate Gillespie. La experiencia de Burcell en la aplicación de la ley proporciona una gran fuente de inspiración para su escritura, ya que ha trabajado como oficial de policía, negociadora de rehenes, detective y artista forense. Su expertise en artes forenses, huellas dactilares y abuso infantil la ha llevado a testificar como testigo experto en la corte.
Los sueños de infancia de Burcell de convertirse en una patinadora olímpica fueron truncados cuando comenzó a patinar en serio en su adolescencia temprana, pero su pasión por el storytelling nunca se desvaneció. Desde niña, siempre supo que quería ser escritora, y su forma física del patinaje sobre hielo la ayudó a sobresalir en las pruebas exigentes requeridas para ingresar a la academia de policía. Nacida en América, Burcell trabajó en la aplicación de la ley durante casi treinta años, comenzando como una de las primeras oficiales mujeres en su departamento. El distintivo que usaba decía "Policía", y una sala de almacenamiento incluso se convirtió en un vestuario para su uso. Su dedicación a su carrera en la aplicación de la ley le ha proporcionado un gran caudal de conocimiento y experiencia, lo que la convierte en una autora respetada y exitosa en los géneros de misterio, thriller y ficción criminal.