Jaycee Dugard tenía 11 años y estaba en quinto grado cuando fue secuestrada en la parada de autobús escolar a la vista de su hogar en South Lake Tahoe, California, el 10 de junio de 1991. A pesar de intensas búsquedas, Dugard permaneció desaparecida durante más de 18 años.
El punto de inflexión en el caso ocurrió cuando Phillip Craig Garrido, un delincuente sexual condenado, visitó el campus de la UC Berkeley acompañado de dos niñas el 25 de agosto de 2009. Su comportamiento inusual desató una investigación que condujo a que Garrido llevara a las dos niñas a una oficina de libertad condicional el 26 de agosto, acompañado de una mujer que fue identificada más tarde como Dugard. Garrido y su esposa, Nancy Garrido, fueron arrestados por secuestro y otros cargos, y ambos se declararon culpables en abril de 2011 de secuestrar y agredir sexualmente a Dugard.
Los agentes de la ley creen que Dugard fue mantenida en un área oculta detrás de la casa de los Garridos en Antioch, California, durante 18 años. Durante este tiempo, Dugard tuvo dos hijas que tenían 11 y 15 años en el momento de su reaparición. El 2 de junio de 2011, Philip Garrido fue sentenciado a 431 años de prisión, y su esposa recibió 36 años de prisión con posibilidad de libertad condicional. Después de su rescate, Dugard publicó una memoria, "A Stolen Life" en 2011, en la que relató sus experiencias durante su cautiverio.